Los estudiantes hoy en día, no tienen el mismo contexto de años pasados, como docente trato de no hacer lo mismo que se hacia o esperaba de los alumnos hace años, no porque el modelo sea erróneo en su totalidad, sino porque estos cambios son cada vez más frecuentes, con cada ciclo los alumnos son distintos entre ellos, lo que conlleva a desarrollar una mayor capacidad de adaptación, comprendiendo que lo mejor para el aprendizaje no es tener a todos los alumnos estandarizados, sino aprovechar las diferencias entre ellos al momento de aprender, comportarse y socializar, nutriendo eficientemente el aprendizaje.
Los estudiantes pertenecen a diferentes generaciones, poseen cada uno una expectativa frente al aprendizaje diferente a la de los demás, la manera como aprenden no es igual en todos, existen diversos factores actualmente que los alejan o distraen del proceso de aprendizaje
Los estudiantes hoy en día, no
tienen el mismo contexto de hace unos años, los cambios generacionales en los
que yo mismo estuve envuelto como estudiante, sentía que el docente me trataba
como a él lo trataron hace 30 años o más, ahora como docente trato de no hacer
lo mismo, no porque el modelo esté mal completamente, sino porque las nuevas metodologías,
tecnologías y el contexto del mundo en que vivimos ha cambiado, y si nosotros no
nos adaptamos al cambio, nos mantendremos atrasados en este nuevo mundo tan
competitivo. Pero estos cambios son
cada vez más frecuentes, cada ciclo que pasa los nuevos alumnos son distintos
entre ellos, lo que me lleva a desarrollar una mayor capacidad de adaptación
hacia los estudiantes.
Se ahora que no todos aprenden de
la misma manera, sus expectativas en comparación a las que yo tuve y las que
tienen entre ellos son variadas, es mi deber como docente identificar qué es lo
que él espera, algo que me hubiera gustado que me pregunten a mí cuando fui
estudiante, pues podremos motivar al alumno de una manera eficiente y positiva,
que nos ayudan a detectar así mismo factores que den soporte a la construcción del
aprendizaje del estudiante y comprender su comportamiento y como utilizarlo
favorablemente para que desarrolle su potencial como alumno. De esta manera,
comprendo que lo mejor para el aprendizaje no es tener a todos los alumnos como
clones, sino que gracias a las diferencias entre ellos al momento de aprender,
comportarse y socializar, se nutren de una manera más eficiente y variada entre
todos.
¿Cómo puede un docente hacer
frente a todos estos nuevos cambios hoy? La labor se ha vuelto más complicada,
pero a la vez más motivadora, lograr en los estudiantes un compromiso es una
manera muy efectiva de mejorar el proceso de la construcción de aprendizaje, para
ellos reconocer las diferencias entre los estudiantes, lo que ellos esperan
obtener, y la manera como aprenden se convierten el los primeros pilares para
lograr una relación armoniosa y la misma vez aprovechar la misma para que el
mismo estudiante con guía y monitoreo del docente aprenda.
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